Perejil: Para saber más sobre la siembra, la plantación...

El perejil rara vez se cultiva a gran escala: es más bien un producto de nicho. Sin embargo, algunos grandes especialistas en aromáticas producen hoy en día perejil, utilizando herramientas mecánicas y tractores, a veces de forma muy similar a los cultivadores de cereales. Nuestra guía de cultivo debe adaptarse en función de la producción elegida.

Como muchas especies de la familia de las apiáceas, el perejil es una planta bienal. Eso significa que no florecerá en el mismo año en que se siembra. De hecho, si se siembra perejil en marzo, por ejemplo, florecerá en el verano del año siguiente. El perejil es una planta resistente: se mantiene viva durante el invierno y resiste al frío, pero sus hojas son muy sensibles a las heladas. Con su fuerte raíz pivotante, el perejil es un buen cultivo para mejorar la calidad del suelo y completar un plan de cultivo. Al final de la producción, hay que destruirlo con un buen triturado o volverá a crecer.

El perejil crece mejor en suelos ligeros, frescos y bien drenados. Sin embargo, al ser una hortaliza de hoja, tiene una necesidad constante de agua, sobre todo en los periodos calurosos del verano. La falta de agua puede provocar una pérdida de rendimiento con un rebrote difícil, variaciones en el aspecto del color del follaje y, a veces, una floración temprana. Por ello, los cultivos de perejil deben estar muy vigilados, especialmente en lo que respecta al riego.

La siembra puede realizarse en campo abierto, bajo cubierta (túnel o invernadero) o en macetas de enero a septiembre. Se pueden utilizar plantas jóvenes en lugar de semillas. En campo abierto, la distancia entre hileras es de unos 30 cm con 100 plantas por metro lineal. Para la producción en fresco, se recomiendan 4 kg de semillas por hectárea; 9 kg para la producción industrial. La germinación es sensible a las altas temperaturas: se aconseja evitar la siembra con temperaturas superiores a 29°C. Al igual que las demás especies de la familia de las apiáceas, la germinación es realmente lenta, entre 10 y 28 días, dependiendo de la estación, la frescura, la pluviometría, ...

El perejil rebrota muy rápidamente: en primavera, el primer corte funciona aprox. 110 días después de la siembra, el segundo corte después de 40 días. En verano, el primer corte puede realizarse antes, 85 días después de la siembra. El segundo corte, un mes después. Para facilitar las futuras cosechas, los cortes deben realizarse en la base de los tallos, justo por encima de las hojas nuevas. Es posible organizar 10 cortes y más durante un año de producción, pero se recomienda encarecidamente el riego después de cada corte, para ayudar al rebrote de las plantas.

El rendimiento oscila entre 10 y 20 toneladas por hectárea y por corte. En los campos, la cosecha puede hacerse a mano o con cosechadoras mecánicas especializadas. La cosecha manual requiere mucho tiempo y es ineficiente en comparación con la mecánica. Por eso sólo se recomienda para las pequeñas superficies de producción.